Las cabalgatas de los Reyes Magos han vuelto a recorrer este domingo las calles de pueblos y ciudades ante la presencia de miles de personas, en buena parte niños, sin que la lluvia que ha hecho acto de presencia en algunos lugares lo haya impedido.
Debido a las previsiones meteorológicas adversas, en muchos pueblos y ciudades se ha adelantado la salida de los cortejos, de forma más llamativa en Ciudad Real capital, donde la cabalgata se ha celebrado esta mañana en vez de por la tarde como es tradicional, mientras que en Cuenca, en Albacete y en Talavera de la Reina han comenzado antes de lo programado para evitar la incidencia de la lluvia.
A su vez, en Toledo se ha acortado el recorrido, de forma que el desfile ha concluido en la Puerta de Bisagra en vez de en la plaza de Zocodover como se había programado, aunque en el caso de la capital de la región la lluvia no ha hecho acto de presencia, aunque gran parte de las personas que han contemplado el paso del cortejo han ido pertrechadas de paraguas, que en todo caso lo han utilizado para recoger los caramelos que se han arrojado.
Tampoco ha llovido en Albacete, donde la salida de la cabalgata se ha adelantado una hora y cuarto sobre el horario previsto, por lo que el desfile se ha desarrollado con normalidad por el centro de la ciudad hasta concluir en la Casa Consistorial, ante la presencia de miles de personas, en particular niños, que han contemplado el paso de los Reyes Magos, que han llegado a la plaza de toros de la ciudad a bordo de vehículos clásicos.
Otro tanto ha ocurrido en Guadalajara, donde no ha llovido y la cabalgata ha mantenido el horario y el recorrido previsto inicialmente, ante la expectación de una gran cantidad de personas que se han agolpado en las calles de la ciudad para ver pasar al cortejo, el que cada uno de los monarcas de Oriente ha ido acompañado de un séquito de unas 300 personas.
La lluvia no impide los desfiles
Pero a pesar del adelanto de horarios, la lluvia si ha hecho acto de presencia en ciudades como Talavera de la Reina y Cuenca, aunque no ha impedido el desarrollo de las cabalgatas, que han discurrido ante miles de espectadores, protegidos con paraguas.
En Talavera de la Reina la lluvia ha tenido una mayor presencia, lo que no ha impedido que la comitiva, que ha estado integrada por 12 carrozas y cortejo con animación y agrupaciones haya recorrido las principales calles y avenidas de la ciudad.
En el caso de Cuenca, hacia las 19.00 horas ha comenzado a caer una lluvia fina, una hora después de la salida de la cabalgata (que se había adelantado media hora por las malas perspectivas meteorológicas), aunque tampoco ha impedido que el cortejo haya seguido su curso hasta el Centro Cultural Aguirre, donde los Reyes Magos ha recibido a los niños conquenses.
Por la mañana, sus majestades de Oriente han llegado a la ciudad en la tirolina que salva la Hoz del río Huécar, la tirolina doble urbana más larga de Europa, antes de recorrer las pedanías de la ciudad y de recorrer la capital conquense en la cabalgata, en la que han participado 11 carrozas y cerca de 400 personas.
También ha sido peculiar la visita de Melchor, Gaspar y Baltasar a Puertollano, a donde han llegado desde Oriente después de cruzar el globo terráqueo a bordo de una nave de Deimos, la empresa aeroespacial ubicada en la ciudad, ante la presencia de hijos e hijas de sus trabajadores, que han seguido en una pantalla la entrada en la atmósfera de esta singular aeronave.
En cambio, en Alarilla (Guadalajara) no ha podido celebrarse la cabalgata aérea, la única de sus características que hay en España, porque la lluvia y fundamentalmente el fuerte viento, han impedido que los Reyes Magos hayan volado en ala delta hasta el pueblo desde el cerro de La Muela, acompañados en parapente por sus pajes.
Caramelos, regalos e ilusión
En cualquier caso, con lluvia y sin ella en las cabalgatas que han recorrido las calles de los pueblos y las ciudades de Castilla-La Mancha se han arrojado miles de kilos de caramelos, regalos y golosinas, como las 11.000 bolsas de gusanitos que se han repartido en Alcázar de San Juan.
Y sobre todo, los desfiles han llevado la ilusión a los miles de niños que han contemplado el paso de los cortejos en los que han ido Melchor, Gaspar y Baltasar.
