El Ayuntamiento de Cuenca ha procedido a retirar el vallado perimetral del edificio del número 2 de la calle Paseo San Antonio de Cuenca toda vez que la gerencia de urbanismo de la capital ha constatado que se han ejecutado las obras para garantizar la seguridad vial, toda vez que en mayo de 2020 cayeran cascotes de la cornisa a la acera.
Fuentes municipales consultadas por Europa Press han recordado que este inmueble es privado y que se está actuando con la mayor celeridad posible en cuanto a los diferentes trámites, subrayando en cualquier caso que ya se han dado los pasos necesarios para evitar peligro para los viandantes y que, de hecho, se ha retirado ya el vallado perimetral.
De forma paralela, «se está trabajando también seguidamente para que los propietarios cumplan con el debido decoro y ornato público del inmueble».
Concretamente, desde el Consistorio conquense señalan que tras los desprendimientos de cornisa que implicaron el vallado perimetral completo del inmueble por parte de Policía Local, se resolvió expediente de orden de ejecución a los propietarios en noviembre de 2020, indicándoles que debían «aportar el proyecto de andamios visado y una memoria valorada de la actuación que incluirá la revisión de todos los planos de la fachada y de las cornisas, además del tejado, para garantizar que finalizada la actuación no hay riesgo de que caigan cascotes y otras partes de las fachadas o cubiertas sobre la vía pública, así como el tratamiento de toda la fachada para devolverle las condiciones de ornato público y decoro a la edificación».
En este sentido, se les otorgó licencia para la actuación y se ejecutó la misma, constatándose tras la inspección efectuada por la Gerencia Municipal de Urbanismo en marzo de 2021 que se habían llevado a cabo las obras necesarias para evitar el peligro de nuevos desprendimientos, por lo que el siguiente paso fue proceder a la retirada del vallado perimetral.
Dicho esto, si bien la orden de ejecución se ha llevado a cabo en cuanto a las medidas más imprescindibles y urgentes, como es evitar el riesgo de nuevos desprendimientos y garantizar la seguridad, desde la Gerencia Municipal de Urbanismo «sí han constatado que la actuación no es suficiente en lo que respecta al cumplimiento del decoro y ornato público, por lo que se está trabajando en ampliar la orden de ejecución para que los propietarios procedan a solventar este punto».