Miembros de la Asociación de Familiares y Enfermos de Bulimia de Cuenca (AFEBAC) impulsan desde Cuenca dos campañas que tienen como objetivo reclamar una mejora de la atención de la sanidad pública a las personas afectadas por Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA).
La primera de esta campaña se lanza desde la plataforma Osoigo, un portal que recoge preguntas ciudadanas para hacérselas llegar a los políticos. En este caso la cuestión la lanza Carlos, un joven conquense que se está recuperando de un trastorno de conducta alimentaria. Dirige su petición a las Cortes de Castilla-La Mancha y en ella explica a los parlamentarios de la región que él era un “niño gordo” al que no le gustaba el deporte hasta que descubrió el piragüismo, que le ayudó a adelgazar muchísimo. A los 19 años dejó de practicarlo, pero se volvió adicto a la práctica del deporte excesivo. Precisamente la asociación Afebac ha hecho un estudio que analiza la relación entre los trastornos alimentarios y las personas deportistas, que pueden ser más vulnerables ante los TCA.
“Tuvieron que tapar y quitar los espejos de mi casa porque no soportaba verme en el espejo, algo que se agravó con la llegada de la pandemia”, relata en primera persona Carlos, que comía “cantidades industriales” de comida para luego vomitarla.
Pesaba 47 kilos cuando le tuvieron que ingresar, pero lamenta que su experiencia con la sanidad pública no fue buena, así que tuvo que recurrir a especialistas privados para comenzar a recuperarse. Por eso pide a las Cortes de Castilla-La Mancha una atención psicológica de calidad y continuada en el servicio regional de salud y que se refuerce la información sobre los TCA para visibilizar la realidad de los afectados.
Un total de 465 personas han apoyado esta pregunta, que necesita reunir 500 respaldos para que llegue a su destinatario.
Campaña de firmas en Change.org
La segunda campaña se ha lanzado a través del portal de firmas Change.org y también está protagonizada por una paciente conquense, Noelia, de 21 años, que lamenta que en la capital conquense no haya unidad de ingreso ni hospital de día para TCA.
“He pedido ingresar en la unidad de TCA de Ciudad Real yendo a urgencias varias veces pidiendo ayuda porque era incapaz de comer, llevaba aproximadamente dos semanas sólo a base de zumos, pero al salir la analítica bien y no estar en peso de riesgo no lo consideraban necesario, sin tener en cuenta mi estado psicológico”, explica la afectada, que ha protagonizado varios intentos de suicidio.
En su petición, que lleva 641 firmas, pide unidades TCA operativas en Castilla-La Mancha y hospitales de día para sus pacientes en todas las provincias.
Desde Afebac destacan que se están lanzando campañas similares por toda España, pero consideran que la situación de la atención a los TCA en Castilla-La Mancha es especialmente mejorable. Sin ir más lejos, Cuenca ha estado durante mucho tiempo sin psicóloga encargada de estos trastornos.
