La temperatura media ha subido 1,31ºC desde 1900 hasta 2018 en casi 60 ciudades españolas en las que viven 16,5 millones de personas, según un estudio del Observatorio de Sostenibilidad que destaca que en Córdoba, Linares y Cuenca este incremento térmico roza los 2 grados centígrados (ºC), frente a Santiago de Compostela, La Coruña y Vigo donde este aumento no llega a 0,80ºC.
El informe ‘Evolución ciudades españolas 1900-2018’, remitido por el Observatorio de la Sostenibilidad a Europa Press, precisa que Córdoba lidera el ranking de este incremento en estos casi 120 años, con 1,99ºC, seguida por Linares (Jaén), con una subida de 1,98ºC de media; Cuenca y Ciudad Real, han subido 1,88ºC su temperatura media y Granada lo ha hecho en 1,80ºC.
Por el contrario, Santiago de Compostela y La Coruña registraron un incremento de 0,76 ºC; Vigo (Pontevedra) 0,77ºC; Gijón, 0,89ºC; Lugo, 0,92ºC; Alicante, 0,96ºC; Orense, 0,99ºC e Ibiza, 1,05ºC, son las localidades donde menos ha subido de media el termómetro.
En todo caso, el trabajo, que compara los datos históricos de la AEMET con los de Copernicus, concluye que las dos series se han comportado de manera similar, es decir con tendencia creciente.
No obstante, los de la AEMET son superiores, por lo que el Observatorio de Sostenibilidad concluye que los datos analizados en el estudio son conservadores respecto al crecimiento real de las temperaturas en España, ya que podrían estar infravaloradas. En todo caso, confirma que el fenómeno es «absolutamente global» en el conjunto del país, pese a las diferencias térmicas.
Así, señala que aunque el estudio se ha centrado en 59 ciudades españolas, sin excepción, todos los españoles se han sometido a un aumento de las temperaturas, con una media de 1,31ºC entre 1900 y 1918 y entre los años 2000 y 2019.
De este modo, la población española vive ahora, en las dos primeras décadas del siglo XXI con una temperatura media de 15,61ºC, un valor 1,31ºC más alto que la media de 14,29ºC de las dos primeras décadas del siglo XX. El estudio concluye que «la población española ha estado sometido a este cambio climático».
Por otro lado, el trabajo expone que en el año 2022 la edad media de los españoles es de 45 años y en ese periodo, las temperaturas subieron 1,56ºC, mientras que para los españoles nacidos en el años 2000, la temperatura media ha crecido 0,54ºC con datos de la AEMET.
«Las evidencias indican que las temperaturas y los efectos del cambio climático indican que están aumentando en todo el país y no se están tomando las medidas necesarias de adaptación», advierte el investigador del Observatorio de Sostenibilidad Fernando Prieto, que critica que, ante esta situación, ni el Gobierno, ni las comunidades autónomas y los ayuntamientos están haciendo «lo suficiente para proteger a sus ciudadanos».
El también autor del informe Raúl Estévez, ha destacado que las ciudades, donde vive la mayor parte de la población española sufren un mayor aumento del calor por lo que considera «necesario actuar ya, en todas y cada una de ellas», sobre todo aumentando zonas verdes, infraestructuras verdes y azules y haciendo necesaria una rehabilitación integral de las mismas».
Por último, el investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el Museo Nacional de Ciencias Naturales Mario Mingarro ha subrayado la importancia de la investigación para determinar con mayor exactitud las acciones que hay que realizar para adaptar las ciudades al cambio climático» y la necesidad de «extender las buenas practicas entre ciudades».