El Partido Socialista de Castilla-La Mancha ha expresado este martes que ve «de sentido común» que el PP apoye la propuesta del grupo socialista en las Cortes regionales para que los diputados tengan que pedir de manera expresa cobrar sus sueldos.
Así ha respondido, a preguntas de los periodistas en una rueda de prensa, el parlamentario socialista Antonio Sánchez, después de que el presidente regional del PP y del grupo popular, Paco Núñez, desvelara que han votado a favor de la medida en la Mesa de las Cortes.
A juicio de Sánchez, el respaldo del PP es «una muestra de acuerdo» en relación al funcionamiento básico del sistema democrático y sobre cómo la Constitución articula que los partidos son organizaciones fundamentales para el desarrollo de la vida política y la participación de los ciudadanos.
Un sistema, ha dicho, que cuesta dinero pero ha añadido que «seguramente cuesta más otro tipo de funcionamiento o sistema político conocido en el pasado y del que sin duda Vox es, al menos, nostálgico».
Con todo, ha incidido en que la propuesta realizada por el PSOE busca «desenmascarar la hipocresía y populismo de Vox» con la cuestión de las subvenciones que reciben los partidos y los sueldos de los diputados, por lo que ha apuntado que ahora tendrán la oportunidad de certificar si esas criticas que hacen de las comunidades autónomas, en las que no creen, y de lo que llaman «chiringuitos», son ciertas.
De esta manera, ha recalcado que los diputados de Vox, al igual que el resto, tendrán que solicitar la subvención a la que tienen derecho como partido y al sueldo como diputados por la dedicación exclusiva y si creen que son «privilegios», podrán rechazarlos.
Por otra parte, preguntado por la reforma de la Ley Electoral para ampliar el número de diputados, Sánchez ha recordado que el presidente regional, Emiliano García-Page, siempre ha sostenido que la renovación o reforma de la ley se debe producir con consenso, porque afecta a la representación de la ciudadanía y para evitar situaciones como las que se produjeron en el pasado cuando «hubo quien modificó la Ley Electoral a su conveniencia por dos ocasiones», ha concluido.