La Policía Nacional ha detenido, en el marco de la “Operación Magreba” a un varón como presunto autor de delitos contra los derechos de los trabajadores, tráfico ilegal de personas e inmigración clandestina. El arrestado, que actuaba en territorio español pero tenía conexiones internacionales, simulaba ayudar a jóvenes procedentes de diversos países de América del Sur, infringiendo la legislación sobre estancia de ciudadanos extranjeros en nuestro país, con ánimo de lucro y prevaliéndose de la situación de necesidad y vulnerabilidad de las víctimas, según nota de prensa.
Según información de la Policía Nacional, la investigación se remonta al año 2023, cuando la Policía Nacional comenzó a recibir denuncias en Guadalajara de varios jóvenes de origen sudamericano que habían sido captados en sus respectivos países de origen con la promesa de ser contratados en equipos de fútbol de categoría profesional en España, con la promesa de regularizar su situación administrativa como extranjeros en nuestro país y optando a un puesto de trabajo en caso de no llegar a triunfar en el mundo futbolístico.
Las víctimas llegaron a pagar importes que oscilaban entre los 2.000 y los 3.500 euros en concepto de gastos de manutención, alojamiento, empadronamiento, inscripción federativa y trámites de regularización, compartiendo viviendas con numerosos jóvenes en la misma situación, en condiciones de hacinamiento e insalubridad, no llegando a ver nunca cumplida la promesa que les habían realizado, según informa Policía Nacional en nota de prensa.
Gracias a la denuncia de varios de estos jóvenes se pudo llegar a averiguar la trama criminal orquestada por el ahora detenido, en la que estarían implicados también varios cómplices de éste, que se encuentran actualmente en paradero desconocido, y están siendo buscados por la Policía Nacional.
Según nota de prensa remitida por Policía Nacional, la investigación reveló que el detenido ya estuvo involucrado en hechos similares en los años 2019 y 2022 en hasta tres provincias diferentes de la geografía española.
Las víctimas han recibido la ayuda pertinente por parte de la Policía Nacional, siendo informados de los recursos humanitarios que ofrece el Estado español, así como los trámites para regularizar su situación administrativa en España y no quedar en situación de desamparo.
